Una de las novedades del 59FICX son los podcasts grabados con público en la cafetería Toma 3. Estos encuentros, con algunos de los cineastas presentes en el festival, son moderados por el crítico y programador de festivales Roger Koza. Ëste presentó a uno de los directores homenajeados este año, João Rosas como un director de “películas que profesan una especie de amor al mundo a través del cine y proporcionan momentos de placer al espectador” y también como “observador de la experiencia de los sentimientos en la vida cotidiana, algo muy difícil de observar y mucho más de filmar”.

El director portugués se mostró satisfecho al manifestar que “en nuestro país tenemos la suerte de poseer la libertad de filmar lo que quieras, ya que nos dan el dinero para producir la película sin esperar que mucha gente vaya a verla”. Así mismo reconoció una de sus mayores influencias como guionista en la figura de João César Monteiro “a la hora de filmar lo cotidiano y mostrar, de una manera simple, las cosas complejas que nos suceden mientras vivimos”. 

Uno de los aspectos con los que más disfruta, en su calidad de cineasta, es “el conflicto que se genera entre el texto escrito por él y las improvisaciones que van surgiendo por parte de los actores, en los ensayos previos al rodaje”, mientras que se manifestó en contra de “la sopa sonora de las películas, en las que se mezclan diálogos, música y sonido ambiente. Yo intento que el sonido ambiente de los lugares en los que ruedo sea un personaje más de mis películas”.

Respecto al futuro próximo, “estoy preparando un largometraje, que voy a empezar a reescribir en Enero, siguiendo con el mismo Universo de mis anteriores obras, las cuales pueden verse como un documental clandestino, en el que vemos crecer a su protagonista”.